primero fue el golpe en el pecho.
no puede ser, dije. nos dije.
así suele ser la muerte, tan cierta y tan imposible.
y después la puntada de dolor.
y las lágrimas y el silencio.
y después ella, mirando ese huequito en la almohada
que ya no más.
y ellos, juntos, riendo
en el sepia de una imagen de juventud
la juventud de las utopías, la de la militancia
esa que supieron mantener siempre brillante en los ojos
y en las manos, y en la voz
esa misma que hoy camina nuestra plaza
con una flor o una bandera
llenando las veredas, y las esquinas
veredas, plazas y esquinas que siempre fueron nuestras
pero que ellos nos recuperaron
estamos ahí,
por él,
para ella
por nosotros
estamos ahí
estamos
y buehh seguirá militando desde el cielo.
ResponderEliminarUn bajón, con sus cosas buenas y malas, diría que lo mejor en bastante tiempo...
ResponderEliminarSalvo por Moyano, el resto de lo que hizo fue impecable.
Fuerzas para CFK, se le viene una complicada
Muy triste....
ResponderEliminarque incertidumbre ahora, no?