con el changuito lleno de preguntas

Ayer fui al supermercado. Es una actividad que me gusta lo suficiente como para soportar todo lo que implica y no terminar asesinando a alguien. Porque, seamos sinceros, ir al supermercado a veces es una tortura.
Son pequeños detalles que se van sumando, y por los que, una vez afuera, terminamos jurándole al cielo que el mes que viene iremos todos los días al chino. No importa que nieve, llueva, truene, o estemos agotadas.

Porque, díganme...

¿A quién se le ocurre poner a vaciar el changuito a una niña de 10 años ? 
Yo comprendo su pedagogía, oh padre moderno. Entiendo que la quiera hacer sentir útil, y todo eso. Pero no se da cuenta que la niña tarda tres horas mirando cada producto que saca del chango y haciendo algún comentario del estilo de "los cereales estos no me gustan papáaaa" o "la lata está aboshada papáaaaa, qué hago papáaa... papáaa".
Hágame un favor, oh padre moderno, si vamos a tener que soportarlo, ¡contéstele por lo menos!


¿Por qué razón uno, que no quiere perder la mitad de su vida haciendo colas, siempre, inevitablemente, elige la cola que más lento avanza?
Me ven llegar y la cajera se pone de acuerdo con la Validadora, para hacer un pase de comedia que podría denominarse "Gritemos todos juntos a voz en cuello el nombre de esta empleada que jamás aparecerá por la caja donde la están llamando y de la que depende que nosotros sigamos nuestra vida"


¿Puede ser que ubique mi carrito y adelante siempre, inevitablemente, haya una vieja que no escucha, no ve y que intenta por todos los medios pagar su compra con Australes?



¿Por qué, usted, pedazo de basura humana, se pone en la cola rápida, con cara de tarado, si sabe que tiene más productos de los permitidos?
Y por qué, cuando se le explica amablemente que debe irse a otro lado, contesta cosas tales como "ah, los 15 productos ¿no son por persona?" mientras blande a su mujer, que lo mira con cara de Roberto por favor, no hagas escándalo.
 
¿Por qué la cinta transportadora nunca transporta un cuerno? 
¿Por qué debo ir corriendo los productos, embolsarlos y contestar a las inquisiciones de la cajera, todo al mismo tiempo?
¿Para qué sirve una cinta transportadora que no transporta? ¿Es una especie de broma?


Y por último, NO, no quiero donar 25 cvos a la fundación PavoLoro. No me interesa que hagan beneficencia en SU nombre con MI dinero, y menos me interesa ayudarlos a pagar menos impuestos, o lo que sea que hacen detrás de su fachada de buenagente.
¡Todos sabemos que no son buena gente! 


Juro que la próxima me voy al chino. 

8 comentarios:

  1. si, por favor!! almacenes de barrio para todos. De esos donde te conocen.. y te avisan:
    - Sole!! llegó el dulce que te gusta.

    Eso quiero...
    Acá chinos no hay...

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  2. Que vuelvan los almaceness de antess!!! Totalmente de acuerdo con el comentario de arriba.

    Es muy real lo que decis de que, supermercados chotos, donan NUESTRO dinero en SU mugroso nombre.

    que patetico!

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  3. Debo confesar que odio a los chinos, pero les voy, porque son tan expeditivos que dá gusto, por eso voy menos al super grande, y me pongo de pie con mi almacenera, que aunque ahora me mudé mas lejitos, me mandó sms al grito de "Pety, tengo el lomito con hierbas", grosssssssa Tere!

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  4. Me hicieron acordar de mi almacenero de la infancia. "Andá a comprar" se decía "andá a lo de Atilio". Ese hombre me vio crecer... conocía a toda la familia.
    Cómo cambiaron las cosas en poco tiempo...

    Me voy a poner en campaña y voy a buscar un almacén, que me permita desterrar el super.

    ¡Me convencieron!

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  5. yo iba de "Aspe"... era turco y bastante chantún

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  6. una vez en el Coto el cajero, le preguntó al tipo que estaba delante mío en la fila si quería donar no sé qué a no sé dónde.

    cuando llegó mi turno, le pago con diez pesos un ticket que sumaba $9,90. el cajero ni me preguntó y auto-donó diez centavos ajenos.

    Yo: disculpá... pero ya que donaste mi vuelto sin siquiera preguntarme, me gustaría saber a quién se los doné.

    cajero: ay, perdoná. son para la fundación piripipí.

    javier: no, no son para la fundación piripipí. son para que el señor Coto pague menos impuestos y no me interesa entrar en esa. preguntale al señor Coto si no quiere donarme mercadería.


    que una legión de imbéciles nos quiera tomar por imbéciles me hace hervir la bilirrubina.

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  7. MyN Aspe sería cualquier cosa, pero jamás nos hubiese pedido donar 15 ctvos a la fundación sarasasa...

    Javier Te da ganas de ahorcarlos con la bolsita de nailon. Y encima cuando les decís que no, te miran como si fueras un malvado que se ríe del hambre en el mundo o algo así.
    ¿Saben para quién trabajan??!!

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Piiiiiiiip